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martes, 16 de abril de 2019

EL DARDO ES LA PALABRA (XIII)

MÁS PALABRAS AL BORDE DE LA EXTINCIÓN


- ¡Qué doloroso resulta ver cómo, poco a poco, día a día, van desapareciendo unas palabras y son sustituidas por otras, de igual o similar significado, pero que, por el hecho de ser neologismos que nos entran por otras lenguas, desconociendo la propia, parece que nos dan más renombre, sin que sepamos distinguir si el neologismo es necesario o innecesario; sencillamente, sin pensar en ello, directamente, nos vamos siguiendo la corriente del viento, venga de donde venga!

- Ésta no es la primera entrada que realizamos tratando de evitar que las palabras se extingan a base de "meteoritos" que los medios de comunicación nos lanzan diariamente, segundo a segundo, como sucedió con los dinosaurios cuando poblaban la Tierra.
- Hoy, mostraremos nuestra absoluta protesta frente a la utilización de los siguientes vocablos:
  • Fake news: ¡Qué bien escriben o pronuncian los medios de comunicación esta palabra cuando ponen el sustantivo "new" en plural, pues en Inglés, como lo fue en Castellano, el sustantivo que denotaba noticia era en plural, "nuevas", término que hoy en día ha quedado completamente desusado. Si hoy en día dijésemos "falsas nuevas", dado que el sustantivo sólo lo utilizamos como adjetivo (por ejemplo: "sandalias nuevas"), nos mirarían como seres tan raros como los dinosaurios. ¡Sin duda! No obstante. La simpleza lingüística de los bustos parlantes o escribientes, lleva a traducir tal expresión de forma literal: "noticias falsas". Con esta traducción, alcanzaríamos un aprobado en el examen, pero estaríamos dejando para el olvido, para la extinción meteórica la palabra correcta que es el sumatorio del sustantivo "noticia" y el adjetivo "falsa", cuyo resultado es "bulo". ¿Qué periodista conoce y no usa esta palabra o, ni siquiera la conoce y, por tanto, no la usa? ¡Qué bien quedamos cuando "hablamos" en Inglés! ¡Qué pena da la ignorancia!
  • Poeta: Cuando se están rescatando del fondo del baúl lingüístico palabras como "sororidad", desproveyéndolas de todo el polvo pleistocénico, para crear u ordenar un lenguaje paritario, de otro lado, se están lanzando meteoritos lingüísticos frente a la palabra "poetisa". "¡Gran poetisa!" decía Francisco de QUEVEDO en su obra "Cómo ha de ser el privado" (1627). Bien es cierto que el "notario lingüístico", el Diccionario de la RAEL distingue perfectamente una forma y la otra, si bien, aclara que "para el femenino es usada también la forma poeta", lo cual, evidentemente, quiere decir que la correcta es "poetisa" para el femenino y "poeta" para el masculino, sin embargo, los medios de comunicación, salvo algunos, han usado y abusado del término "poeta" para referirse a la recientemente fallecida poetisa valenciana Francisca AGUIRRE. Sin embargo, cuando se utiliza el término "leader" o líder, director o guía, sí que se utiliza "lideresa". ¿Qué es lo que cambia el criterio en los Medios? ¿La cursilería? ¿La ignorancia? ¿Todo ello junto?
  • Visibilizar: No hay repuesta a pregunta de periodista ante una persona o grupo de personas que están exhibiendo una idea, un grupo, una enfermedad o cualquier otra cuestión, proposición o planteamiento, que no utilice la palabra "visibilizar". "Estamos aquí para visibilizar la violencia en el fútbol" "Estamos aquí para visibilizar el cierre de las librerías" "Queremos visibilizar la suciedad que hay en el barrio". Si acudimos al Diccionario de la RAEL, comprobamos que "visibilizar" consiste en "hacer visible artificialmente lo que no puede verse a simple vista, como con los rayos X los cuerpos ocultos, o con el microscopio los microbios." Al parecer, para visibilizar algo, precisamos de un artilugio o artefacto que nos permita ver aquello que nuestros propios ojos no nos permiten ver, es decir, que precisamos de un "objeto" que se interponga entre el ojo y el hecho, acto, dato o cosa a ver. Siendo así, nos preguntamos si "el cierre de librerías" precisa de algún artilugio que se interponga, si "la violencia en el fútbol" y "la suciedad en el barrio", también. Siendo, pues, la respuesta negativa ¿por qué no utilizamos verbos como mostrar, exhibir, exponer, llamar la atención y demás, en lugar de lanzarles meteoritos lingüísticos tendentes a su desaparición?
  • Ciudadanía: Dentro del ánimo de absoluta igualdad en el lenguaje, llegan los medios de comunicación, auspiciados por los políticos, a lanzarnos meteoritos con la palabra "ciudadanía", la cual, según el Diccionario de la RAEL es la "cualidad y derecho de ciudadano", o ciudadana, sin duda. Esto es, se "metatesiza" o sustituye la "cualidad" por el sustantivo, "ciudadanía" por "ciudadano" o "ciudadana", llevando a estos sustantivos a la "hoguera" del lenguaje, tratando a la cualidad como si fuese un grupo social, cuando ni lo es, ni lo ha sido nunca. ¿Harían lo mismo los Medios y los Políticos con la palabra "misericordia" en lugar de utilizar "misericordioso" o "misericordiosa"? Veamos "la misericordia -por "misericordes"- necesita saber si irá al Cielo o al Infierno" " la agilidad -por los "ágiles"- necesita conocer si participarán en los Juegos Olímpicos" 
  • "Negocios al rescate": Éste es el título de un programa televisivo en una cadena que exhibe (¿diríamos "visibilizan"?) programas que vienen allende el atlántico con un viento tan fuerte como húmedo, tan húmedo que produce un "cortocircuito" en el traductor del título precitado. En efecto, el título original es el de "Business rescue", cuya traducción literal al Castellano es la de "Rescate de negocios" o, mejor dicho, sería "Rescatando empresas"; sin embargo, los canales televisivos que emiten (¿diríamos "visibilizan"?) dicho programa lo traducen como "Negocios al rescate", olvidando que en Castellano quienes van "al rescate" son las personas, los bomberos o los servicios de emergencias, es decir, el sujeto activo de la oración. Bastaría con añadir el tiempo verbal más el olvidadísimo artículo determinado, para descubrir este dilema. Así sería la frase completa, sin elisiones: "Los 'negocios' van al rescate" ¿qué tipo de negocios? ¿al rescate de quién? ¿de qué? ¿de qué manera van?, ¿cómo puede ir un "negocio" a rescatar qué cosa? ¿Por qué usar ese rebuscamiento o retorcimiento de palabras cuando es más sencillo hacer las cosas sencillas? "Rescatando empresas".
  • "Di, hola!": Así lo escribimos, como se acostumbra a escribir en estos días, sin el signo de admiración al inicio de palabra y sin los dos puntos (:), sustituidos éstos por una coma (,), que lo mismo se usa para un roto, que para un descosido. No obstante lo dicho, vamos a escribirlo "correctamente": "Di: ¡Hola!". Desvelado este "misterio", vamos a ver sobre qué palabra se lanza el "meteorito". ¿Por qué no decimos "¡Saluda!"? En efecto, si en Inglés les gusta decir "Say Hello!" porque utilizar el término "Salute!" queda como extremadamente culto e inusual ¿por qué hemos de hablar como los angloparlantes y no utilizar el sencillo "¡Saluda!"?
  • "Bebidas frías": Cada vez que pasamos por un bar o similar y leemos este texto, más que enfriarnos su lectura, nos calienta enormemente, pues se vuelve a tomar la expresión del Inglés "cold drinks", cuando en Castellano existe "refrescos". ¿Por qué no utilizamos, pues, la palabra castellana? ¿Es que ya no sabemos utilizar el verbo "refrescar". Si "fresco" es lo que no está del todo frío, "re-fresco", será, pues, lo que sí está del todo frío.  

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